PAREJA INTELIGENTE.

A cuántas personas he escuchado decir que desean a una pareja inteligente en sus vidas!
Yo los animaría a que se lo pensaran detenidamente.
Las personas inteligentes toman decisiones por sí mismas, tienen deseos propios y ponen límites. Te hablan con la verdad. Tú nunca serás el centro de su vida porque su vida gira sanamente en torno a ellos mismos.
Una persona inteligente y emocionalmente madura, no va a dejarse manipular ni chantajear, no se traga culpas, asume responsabilidades.
Las personas inteligentes cuestionan, analizan, reflexionan, sacan conclusiones, no se conforman, avanzan.
Esas personas tuvieron vida antes de ti y saben que la seguirán teniendo
una vez que tú te hayas ido.
Las personas inteligentes están para avisar, no para pedir permiso. No buscan en la pareja a un líder a quien seguir, a un papá que les resuelva la vida,
a una mamá que los cuide, ni un hijo a quien rescatar.
Las personas inteligentes no quieren seguirte ni marcarle el camino a nadie,
quieren caminar a tu lado. Ellas saben que la vida libre de violencia es un derecho, no un lujo ni un privilegio.
Las personas inteligentes expresan enojo, tristeza, alegría y miedo por igual,
porque saben que el miedo no las vuelve débiles, ni el enojo las transforma en monstruos. Esas dos emociones y las demás, todas en conjunto, las vuelven más humanas. Y ya!
Una persona inteligente es libre porque ha peleado por su libertad. Pero no es víctima, es sobreviviente. No trates de encadenarla porque ella sabrá cómo escapar. Recuerda que ya lo ha hecho antes.
La persona inteligente sabe que su valor no radica en la apariencia de su cuerpo ni en lo que haga con él. Piénsalo dos veces antes de juzgarla por su edad, estatura, volumen o conducta sexual, porque esto es violencia emocional y ella lo sabe.
Así que, antes de decir que deseas a una pareja inteligente en tu vida, sería más saludable que te cuestionaras acerca de si estás listo para encajar en la suya.